La Creación

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¿Alguna vez te has preguntado cuál fue el primer ave que existió o si nació sola, o de dónde salieron su mamá y su papá? Déjame decirte que criaturas tan hermosas como esas y todas las demás, junto con lo que nos rodea, no se hicieron solas ni son producto de una explosión entre planetas ni nada de esas cosas sin sentido. 

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Hubo Alguien muy sabio y con gusto exquisito que hizo todo con diversos colores, especies y tamaños. Ese Alguien hizo muchas cosas hermosas en este planeta y en el Universo entero! Alguien que tiene personalidad y sentimientos, también tiene un nombre, se llama YAHWEH. Él es nuestro Creador y dejó un Libro escrito por diversos hombres fieles a Él que escribieron lo que les dictó, con muchas cartas para que supiéramos de dónde venimos y cómo surgió todo y para que supiéramos qué hacer y qué no hacer.

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Ese Libro se llama: Las Sagradas Escrituras o La Biblia.

 

El primer Libro llamado Génesis (Bereshit) capítulo 1, nos narra la historia de la Creación, dice que cuando Yahweh comenzó a crear el cielo y la tierra, nuestro planeta no tenía forma y que estaba vacío, todo esta oscuuuuro...

entonces Yahweh dijo: "Que haya luz" y en seguida

todo se iluminó, aunque no eliminó la oscuridad,

sino que dejó un poco de ella para llamarla noche

y a la claridad la llamó día. Así creó Elohim (Dios) el

Día y la Noche en el PRIMER DÍA de su creación.

 

 

Luego, en el SEGUNDO DÍA, Yahweh hizo un hermoso cielo azul, con nubecitas blancas                                 ¡listo para dar refugio a las próximas criaturas a crear!

 

Ahora le tocó el turno a la Tierra, Yahwéh juntó el grupo de aguas en un solo

lugar y lo llamó Mar, y a la parte seca la llamó Tierra; entonces, con su

palabra hizo que germinara la vegetación: plantas con semillas y árboles

frutales. Le gustó mucho y así fue el TERCER DÍA.

 

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Al CUARTO DÍA Yahweh hizo lucecitas muy hermosas en el

cielo, creó el sol, la luna y las estrellas para separar la luz

de la oscuridad, para diferenciar el día de la noche y para

señalar los días, los meses y los años.

 

 

 La tierra estaba tomando forma ya, estaba bonita, pero nuestro Creador quiso hermosearla aún más.

Así que dijo: “Que produzca las aguas enjambres de criaturas vivientes y de aves que vuelen sobre la tierra a través del firmamento del cielo”.

Elohim creó criaturas grandes y  pequeñas que se  mueven en el agua y también

mucha variedad de aves.  Toooodo esto lo hizo el DÍA QUINTO.

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También hizo ganados, bestias salvajes y animales que se arrastran

por toda la tierra. ¿Y saben qué más hizo en este SEXTO DÍA? ¡Pues

hizo al hombre y a la mujer! Yahweh dijo: “Hagamos al hombre a nuestra

semejanza. Ellos gobernarán los peces del mar, las aves del cielo,

el ganado, toda la tierra y todo lo que se arrastra por el suelo”.

Qué especial, verdad! Yahweh hizo al hombre a su imagen, lo bendijo

a él y a su esposa Jawah y le dijo que tuvieran hijitos. Le presentó a

tooooooooooda su hermosa creación y le dijo lo que podían comer y lo que no podían.

Al día siguiente, Yahweh no creó nada, nada… sólo contempló lo que

había hecho y le pareció muy bonito todo, así disfrutó de ese día junto a sus criaturas! Elohim bendijo el DÍA SÉPTIMO y lo declaró sagrado para siempre, un día especial que todos sus hijos debemos apartar para descansar, para disfrutar y para estudiar de Las Sagradas Escrituras. ¿Qué otras cosas lindas podemos hacer en este día séptimo, llamado Shabbat (en hebreo) o Sábado (en español)?

 

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